Monday, July 06, 2009

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¿Qué es más fácil, decir hola o decir adiós? En este tiempo de extranjería uno de los eventos más comunes después de cierto tiempo es despedirse de gente que como uno, vive algún tipo de exilio o viaje y al final debe regresar. En tres años le he dicho adiós a tanta gente que uno deja de preocuparse si los volverá a ver, simplemente se van, desaparecen a la vuelta de una esquina, tras el movimiento de un tren, se pierden entre la gente de una calle o del metro. Claro que duele decir adiós, pero Londres es una amante celosa y apenas han pasado unas horas desde la despedida cuando ya hay algo nuevo o uno debe pensar en los problemas del transporte, el clima, el dinero, la gente…
Pero ahora soy yo el que me voy; diré hasta luego, o hasta pronto, o adiós y me perderé a la vuelta de una esquina y entonces Londres habrá quedado atrás y yo en su pasado, como una huella más de sus lugares que recorrí. Y no sé si es a causa de mi facilidad para encontrarme en caminos de nostalgia, pero me cuesta trabajo decirle adiós a esta ciudad que me ha hecho sentir en casa. Ésa es quizá el lado más amable de Londres, todos son bienvenidos, todos caben, todos se pueden sentir en casa, pero no es su casa. El jueves pasado fue mi despedida con los del trabajo y después de una buena cena y varias copas de vino encima me fui a la casa caminando por el Southbank hasta que me paré a fumar en un muelle de madera, con St Paul Cathedral como un fantasma de mármol al fondo, el puente de Blackfriars a la derecha, un clima de 25 grados y el Támesis a mis pies, y claro, me dio risa, porque entre la borrachera y la conciencia comprendí que no había razón para estar triste, yo no soy de aquí y por más que estuviera frente a la imagen más perfecta de esta ciudad que amo, no sería parte íntegra de su paisaje porque al primer invierno me estaría quejando y maldiciendo el aire helado y la oscuridad y todas las torturas del frío. Total, el viernes regresé con Daniela al mismo lugar y todo seguía ahí, el calor, St Pauls y dos botellas de vino. Y preferí dejar de pensar en despedidas y adioses en el atardecer del Támesis, es mi turno de irme y nada más.

1 comment:

Cheto said...

segun entiendo regresan a Mexico no? o como esta todo esto que no comprendo muy bien?...Un saludo....me avisan si vienen a Mexico para armar la peda no?